La agobiante deuda de EE.UU.: pronostican que rozará el 150% del PIB hacia el 2050
Una gráfica de la dinámica de la deuda pública estadounidense difundida esta semana por la Oficina Presupuestaria del Congreso de EE.UU. muestra un auge en desarrollo desde el año 2010 comparable solo con la II Guerra Mundial. La previsión para la década del 2030 supone que superará el pico correspondiente a la principal contienda del siglo XX e irá más allá exponencialmente.
Una explicación dice que ese previsible crecimiento constante de la deuda en poder del público se debe a los déficits persistentemente grandes. Se estima que en el año 2029 el índice llegará al 93% del PIB anual y hacia el 2049 ascenderá al 150%: una cifra jamás vista en el pasado. Con algunas enmiendas en la legislación vigente podría producirse un aumento aún mayor, alude el pronóstico.
Mientras tanto, la espiral de deuda va mucho más allá de la cifra básica de 22 billones de dólares correspondiente a la deuda en poder del público. El endeudamiento de todos los sectores, incluidos los bonos, préstamos y obligaciones intergubernamentales, ha superado los 72 billones de dólares, según estimó en marzo pasado la Junta de Regentes del Sistema de la Reserva Federal.
Una vez dividido el enorme monto de la deuda por el número de habitantes de EE.UU. (329 millones, según el censo nacional), sería casi de 220.000 dólares por persona.
Durante los últimos 40 años, el Tesoro de EE.UU., los estados y el sector financiero han estado endeudándose a un ritmo vertiginoso, con un énfasis especial en torno al año 2008, cuando comenzó la crisis financiera mundial.
La deuda bruta subió desde 5 billones de dólares a principios de la presidencia de Ronald Reagan hasta los 29 billones cuando George W. Bush asumió el cargo. A continuación la cifra casi se duplicó hacia la crisis, alcanzando los 54 billones de dólares, y desde entonces se ha incrementado otros 18 billones.
El mes pasado, EE.UU. volvió a alcanzar el techo de deuda pública establecido. El Departamento del Tesoro tendrá ahora que tomar medidas extraordinarias para evitar que el país incumpla el próximo límite de la deuda a finales de septiembre o a principios de octubre.