EE.UU. adopta un nuevo enfoque y dejará de propiciar cambios de gobiernos y sistemas políticos extranjeros, reporta NYT
La Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, ha rechazado la política de "promoción de la democracia" impulsada por gobiernos anteriores en favor de la "resiliencia democrática". La nueva política se centra en la cooperación y el fortalecimiento de las naciones con sistemas democráticos en lugar de cambiar los regímenes políticos o los gobiernos de otros países, informa el New York Times citando fuentes de la Casa Blanca.
Durante el discurso pronunciado en Filadelfia la semana pasada, Biden destacó que la democracia en Estados Unidos está amenazada. Afirmó que los ciudadanos estadounidenses libran "una batalla por el alma de esta nación".
Este mensaje no se limita solo a la situación en Estados Unidos. Biden decidió hacer de la defensa de la democracia, tanto dentro del país como en el extranjero, un tema central de su agenda para difundir un mensaje firme a los votantes estadounidenses. Esta agenda da la oportunidad al presidente de encabezar una política exterior basada en el internacionalismo liberal, escribe el New York Times.
Es la idea basada en que la estabilidad mundial proviene de los sistemas democráticos, el libre mercado y la participación en las organizaciones internacionales dirigidas por EE.UU. Es una postura especialmente importante para el país, que está en medio de una pugna mundial entre democracias y autocracias, asegura la fuente consultada.
Sin embargo, en los últimos años, esta manera de enfocar la política exterior ha sido objeto de críticas y, al apoyarla, Biden se arriesga a ser considerado un imperialista, menciona el periódico estadounidense. Por ello, el nuevo enfoque de EE.UU. va a hacer más hincapié en la cooperación entre democracias, destacan los ayudantes de Biden. También afirman que abordan la defensa de la democracia con humildad y predisposición a aprender de otras naciones.
Para empezar a aplicar esta política, Biden ha solicitado al Congreso cientos de millones de dólares para iniciativas a favor de la democracia, que promuevan los esfuerzos anticorrupción, el periodismo independiente, las elecciones y los activistas prodemocráticos.
También se espera que la Casa Blanca anuncie una segunda Cumbre multinacional para la Democracia. Y la Estrategia de Seguridad Nacional, que podría publicarse este mes, destacará el refuerzo de las democracias como una prioridad política, según los funcionarios estadounidenses.