Los negocios de Elon Musk corren el riesgo de ser investigados por el Gobierno de EE.UU.
Miembros de la Administración del presidente de EE.UU., Joe Biden, están discutiendo sobre la idoneidad de investigar los negocios de Elon Musk en materia de la seguridad nacional, reporta este viernes Bloomberg citando a personas familiarizadas con el asunto.
De acuerdo con su información, las discusiones se encuentran en una etapa temprana y actualmente las autoridades estadounidenses están analizando qué herramientas podrían usar para llevar a cabo la inspección.
Detallaron que el Comité de Inversiones Extranjeras en EE.UU. podría realizar la investigación teniendo en cuenta que se espera que varios inversores extranjeros participen en la compra de Twitter por parte de Musk. Bloomberg recoge que se trata del príncipe saudita Al Waleed bin Talal, la plataforma de intercambio de criptomonedas Binance (fundada por un empresario que nació en China) y un fondo soberano de inversión de Catar.
Bloomberg señala que altos funcionarios de la Administración de EE.UU. se sintieron "incómodos" después de que Musk afirmara que SpaceX no puede continuar financiando terminales Starlink en Ucrania "por tiempo indefinido", ni enviar nuevas terminales a ese país de forma gratuita, por lo que solicitó al Departamento de Defensa de EE.UU. asumir los costos de proveer a Kiev dichas terminales. Sin embargo, un día después, el empresario aseguró que continuará financiando terminales Starlink.
También existe preocupación por lo que "ven como una postura [de Musk] cada vez más amigable hacia Rusia, tras una serie de tuits que esbozaron propuestas de paz favorables al presidente Vladímir Putin", reporta Bloomberg.
En los tuits en cuestión, publicados a principios de mes, Musk propuso un plan de resolución pacífica del conflicto en Ucrania que consistía en cuatro puntos: repetir bajo supervisión de la ONU los referendos en las regiones de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporozhie, aceptar que Crimea es parte de Rusia, garantizar el suministro de agua a la península y mantener el estatus neutral de Ucrania. La propuesta recibió una ola de críticas de parte de internautas y representantes del Gobierno ucraniano.