Una presa brasileña reduce su pena por amamantar a su hija

Una decisión del Superior Tribunal de Justicia (STJ) de Brasil puede marcar un antes y un después en el reconocimiento de los derechos de las mujeres en las cárceles: una presa logró reducir su pena por amamantar a su hija recién nacida.

Según G1, el tribunal consideró la lactancia como una forma de trabajo equivalente al cuidado en la guardería de la penitenciaría de Mogi Guaçu, en Sao Paulo, donde la interna cumple una condena de 13 años y cuatro meses por tráfico de drogas, además de una multa de casi 72.000 reales (unos 14.000 dólares).

La niña nació en septiembre de 2023, mientras la madre estaba en reclusión. Ella amamantó durante seis meses a la bebé, como dicta la ley, hasta que fueron separadas y la pequeña quedó al cuidado de su abuela. El padre también está en prisión.

La legislación penal brasileña permite que los presos reduzcan su pena en un día por cada tres trabajados o estudiados. La Defensoría Pública de Sao Paulo argumentó que la lactancia, una actividad física y mentalmente demandante, debía ser reconocida como trabajo. El STJ le dio la razón.

"Sería desigual permitir la reducción de pena por cuidar a los hijos de otras presas, pero no por cuidar al propio", afirmó el juez Messod Azulay Neto.

El magistrado argumentó que, aunque la lactancia no genera ingresos, eso no invalida su valor como trabajo dentro del sistema penitenciario. "La ausencia de 'expresión económica' no impide el reconocimiento de la remisión de pena", destacó.

Gracias a decisión, la reclusa podrá cambiar antes a un régimen semiabierto, en el que se puede trabajar o estudiar durante el día y dormir en prisión por la noche, lo que le permitirá recuperar su libertad dos meses antes de lo previsto. Su pena ahora termina en abril de 2029.

"La economía del cuidado"

No es la primera vez que el STJ se pronuncia en este sentido, ya que hubo una decisión similar en 2024 por parte del Tribunal de Justicia de Sao Paulo, que redujo el plazo para conceder el paso de régimen cerrado a semiabierto a otra presa que amamantaba a su hijo, lo que supuso un fallo inédito a nivel estadual.

Asesinan a una embarazada, abren su abdomen y se quedan con el bebé

Actualmente, en Sao Paulo hay 54 mujeres embarazadas y 44 presas que amamantan a sus bebés recién nacidos. En 2024, se registraron 61 nacimientos en las cárceles de este estado.

La Defensoría Pública de Sao Paulo destacó que es la primera vez que un tribunal nacional reconoce "la economía del cuidado" —el trabajo no remunerado que implica cuidar niños, ancianos, personas con discapacidad y el hogar— para reducir la pena de una madre que amamantó a un niño en prisión.

"Si bien la ley sobre ejecuciones penales no contiene una disposición específica al respecto, es una clara discriminación que no se reconozca la lactancia materna, una actividad socialmente esencial y física y mentalmente agotadora. En una sociedad patriarcal como la nuestra, el cuidado casi siempre termina atribuyéndose a las mujeres", dijo Bruno Shimizu, coordinador del Centro Especializado de Situaciones Carcelarias.