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¿Qué se sabe del submarino Perm, a cuya puesta a flote asistió Vladímir Putin?
Es el sexto sumergible del proyecto naval más caro y avanzado de Rusia, portará los primeros, y de momento únicos, misiles de crucero hipersónicos navales indetectables para los radares.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, asistió este jueves a la ceremonia de botadura del nuevo submarino de propulsión nuclear Perm, celebrado en los astilleros Sevmash de la ciudad de Severodvinsk, en la provincia norteña de Arjanguelsk.
¿Qué se sabe del Perm?
El Perm es el sexto submarino de ataque de propulsión nuclear del proyecto 885/885M Yasen-M, considerado el más avanzado de la construcción naval submarina rusa. Además, se trata del proyecto más caro en la historia naval de Rusia.
Los sumergibles de propulsión nuclear de la clase Yasen desplazan 8.600/13.800 toneladas (en emersión/sumergido) y alcanzan una velocidad de 16/31 nudos. Estas naves podrán descender hasta 600 metros de profundidad y portan una amplia variedad de misiles de crucero y torpedos teledirigidos, para lo cual disponen de tubos lanzatorpedos y silos de misiles verticales que pueden albergar misiles de crucero supersónicos Onix y Kalibr, o los misiles hipersónicos 3M22 Tsirkón.
El submarino Perm es el sexto submarino de la familia Yasen. Sin embargo, el mando militar del país presta especial importancia a esta nave.
Precisamente el Perm será el primer portador reglamentario de los Tsirkón, los únicos misiles de crucero hipersónicos antibuque del mundo, para lo cual este submarino tiene un diseño ligeramente diferente al de sus predecesores del mismo proyecto (que son portadores de los misiles P-800 Oniks y Kalibr-PL).
¿Qué son los Tsirkón?
Tsirkón es el primer misil de crucero hipersónico naval del mundo que ha sido puesto en servicio y ha demostrado sus características en varias pruebas de lanzamientos, tanto subacuáticos (del submarino К-560 del Proyecto 885 Severodvinsk) como desde un buque de superficie (desde la fragata Admiral Gorshkov en el mar de Barents), en los cuales sus blancos se encontraban de 350 a 1.000 kilómetros de distancia.
Desde el inicio de su desarrollo, el Tsirkón ha sido uno de los proyectos más clasificados de la industria de defensa rusa, por lo que varios de sus parámetros todavía se desconocen por motivos de seguridad nacional.
No obstante, tras una serie de pruebas, se dio a conocer que el misil 3M22 Tsirkón es capaz de alcanzar velocidades equivalentes a Mach 9 (2,65 km por segundo) a altitudes de unos 20 kilómetros, es decir, más de 10.000 kilómetros por hora. La carga de combate convencional del misil varía entre 300 y 400 kg, pero se informa que también pueden transportar una carga nuclear.
A dicha velocidad, se forma una nube de plasma delante del misil que absorbe las ondas de radio y hace que el Tsirkón sea indetectable para los radares enemigos.
Según el capitán de navío Ígor Krojmal, comandante de la fragata Admiral Gorshkov de la Flota del Norte rusa, esta arma tiene "un alcance de hasta 1.500 kilómetros".
La apariencia de los misiles todavía se mantiene en secreto: se cargan en el buque en contenedores cerrados. Sin embargo, se puede juzgar con certeza el tamaño del misil basándose en las características de su lanzador. Así, el Tsirkón tiene unos 9 metros de largo y 60 centímetros de diámetro, señaló Krojmal.
Por su parte, el comandante de la unidad de combate de misiles y artillería de la fragata Admiral Gorshkov, Gueorgui Rosliakov, afirmó que el Tsirkón es capaz de atacar objetivos individuales o un grupo de objetivos con gran precisión, sin importar si la nave enemiga está en movimiento o no.
Además, el Tsirkón puede destruir tanto objetivos navales como terrestres, y se trata del primer misil hipersónico del mundo que puede lanzarse desde buques de superficie y desde submarinos en inmersión.
Uso en combate
En febrero de 2024, el presidente Vladímir Putin confirmó por primera vez el uso en combate de este misil contra objetivos en Ucrania.
En noviembre del mismo año, volvió a afirmar que los Tsirkón se utilizaron para atacar blancos ucranianos en respuesta al uso de misiles occidentales contra territorio ruso.
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