Los medios y conspiradores que mintieron sobre la supuesta colusión entre Donald Trump y Rusia durante la campaña presidencial del republicano en 2016 deben rendir cuentas, insistió el enviado especial de la Presidencia rusa para la cooperación económica con países extranjeros, Kiril Dmítriev.
"¿Cuándo serán castigados los conspiradores detrás del engaño sobre Rusia contra el presidente Trump? ¿Cuándo admitirán los medios de comunicación que desinformaron al público siguiendo las instrucciones de los conspiradores, se disculparán y afrontarán las consecuencias?", escribió el enviado del Kremlin en su cuenta de X, refiriéndose a la campaña de desinformación conocida como 'Russiagate'.
El alto funcionario subrayó que hasta que los medios asuman la responsabilidad, "la maquinaria de narrativa de izquierda seguirá mintiendo", señalando que "la rendición de cuentas es el único camino hacia la verdad".
Dmítriev publicó el video, previamente compartido por Donald Trump, en el que una de sus simpatizantes pide al presidente que revise la Ley Smith-Mundt, enmendada por el exmandatario Barack Obama y el entonces vicepresidente Joe Biden, para que las corporaciones mediáticas asuman su responsabilidad por difundir mentiras.
La internauta también propuso rebautizar la ley en homenaje al activista Charlie Kirk, asesinado en Utah este miércoles, al considerarlo una víctima del odio y mentiras difundidos por la prensa.
- El escándalo sobre el supuesto papel de Moscú en las elecciones estadounidenses de 2016, el llamado 'Russiagate', volvió a captar la atención pública a mediados de julio pasado, cuando la directora de Inteligencia Nacional de EE.UU., Tulsi Gabbard desclasificó documentos que revelan "pruebas abrumadoras" de cómo el expresidente Barack Obama y su equipo de seguridad nacional impulsaron información falsa para inculpar a Rusia de interferir en los comicios.
- Según datos desclasificados, Obama ordenó que no se revelaran archivos que demostraban que Moscú no tenía ningún vínculo con la campaña electoral de Trump en 2016. Por el contrario, se impulsaron evaluaciones falsas para promover la narrativa de la injerencia rusa.
- Desde Rusia calificaron ya en ese momento las acusaciones de infundadas, al tiempo que el presidente del país, Vladímir Putin, las definió como "histeria".