El Gobierno de Colombia rechazó este martes "cualquier amenaza de agresión externa" que socave su integridad y soberanía, como respuesta a las declaraciones del presidente estadounidense, Donald Trump, quien anunció este martes que su país sopesa comenzar a realizar "ataques en tierra" al hablar sobre las operaciones militares contra presuntas 'narcolanchas'.
"Recibimos con gran preocupación las recientes declaraciones del presidente de EE.UU., Donald J. Trump, en las cuales sugiere la posibilidad de realizar acciones militares contra Colombia bajo el argumento del combate al narcotráfico", se lee en un comunicado publicado por la Cancillería en su portal web.
Del mismo modo, las autoridades colombianas reafirmaron su "compromiso con la paz, la soberanía nacional y el respeto al derecho internacional", al tiempo que, en su condición de país latinoamericano y caribeño, rechazaron "cualquier amenaza de agresión externa que vulnere la dignidad, la integridad del territorio y la soberanía del pueblo colombiano".
Comunicado de Prensa sobre posición de Colombia ante las recientes afirmaciones del presidente de Estados Unidos. 👇https://t.co/w4Y1IoDZnIpic.twitter.com/CwTcUgSXLf
— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) December 3, 2025
"Hacemos un llamado urgente a la fraternidad entre América Latina y el Caribe para que como pueblos hermanos latinoamericanos prevalezca la unión ante cualquier intento de intervención externa que pretenda socavar la soberanía. Colombia es un pueblo con raíces profundas que construye un futuro de prosperidad y tranquilidad para toda la región", concluye el documento.
"Indeclinable compromiso"
Bogotá reiteró asimismo que "continúa con el indeclinable compromiso de la lucha contra el narcotráfico, abordando el problema de manera integral, equilibrada, multidisciplinaria y con base en evidencias, respetando los derechos humanos y las libertades fundamentales, de acuerdo con el principio de responsabilidad común y compartida".
A ese respecto, detallaron que su enfoque "impulsa la necesidad de abordar y solucionar las tensiones que el sistema de fiscalización internacional de drogas genera al relacionarse con los derechos humanos, la salud pública, el medioambiente, las cuestiones de género y la protección de poblaciones vulnerables, como los pueblos indígenas, afrodescendientes y campesinos".
De su parte, el mandatario colombiano, Gustavo Petro, advirtió a Trump que "atacar" la soberanía de su país equivale a "declarar la guerra". "No amenace nuestra soberanía, porque despertará el jaguar", reiteró el dignatario suramericano en un mensaje posteado en su cuenta de X, en el que también le exigió que dejara de calumniarlo.
Ataques terrestres a "cualquiera"
Previamente, el dignatario estadounidense afirmó ante la prensa que los bombardeos de sus fuerzas militares contra pequeñas embarcaciones en el mar Caribe y el océano Pacífico, que ya suman más de 80 personas asesinadas bajo la acusación no probada de trasegar drogas a EE.UU., han sido efectivos para disminuir el narcotráfico, razón por la cual se extenderán en breve a tierra.
"Ya saben, en tierra es mucho más fácil. Y conocemos las rutas que toman. Sabemos todo sobre ellos, sabemos dónde viven los malos. Y también vamos a empezar con eso muy pronto", sostuvo.
En ese contexto, aseveró que "cualquiera" que fabrique drogas y las venda a EE.UU. podría ser atacado en tierra. "He oído que Colombia, el país de Colombia, está fabricando cocaína. Tienen plantas de fabricación de cocaína, ¿de acuerdo? Y luego nos venden la cocaína. Se lo agradecemos mucho. Pero sí, cualquiera que esté haciendo eso y vendiéndolo a nuestro país está sujeto a ataque. No necesariamente solo Venezuela. No, no solo Venezuela, no", dijo al respecto.
Claves de la agresión de EE.UU.
- Despliegue militar: desde agosto pasado, EE.UU. mantiene desplegada una fuerza militar significativa frente a las costas de Venezuela, justificándola como parte de la lucha antidrogas. Washington anunció posteriormente la operación Lanza del Sur, con el propósito oficial de "eliminar a los narcoterroristas" del hemisferio occidental y "proteger" a EE.UU. "de las drogas que están matando" a sus ciudadanos.
- Operativos letales: como parte de estas operaciones se han realizado bombardeos contra presuntas embarcaciones de narcotraficantes, con un saldo de más de 80 personas muertas y sin evidencia de que realmente traficaran con estupefacientes.
- Acusaciones y recompensa: Washington ha acusado sin pruebas a Maduro de liderar un cártel de narcotráfico y ha duplicado la recompensa por su captura.
- Postura venezolana: Maduro denuncia que el objetivo real de EE.UU. es un "cambio de régimen" para apoderarse de las inmensas riquezas petroleras y gasísticas de Venezuela.
- Falta de sustento: organismos como la ONU y la propia DEA señalan que Venezuela no es una ruta principal para el narcotráfico hacia EE.UU., ya que más de 80 % de las drogas que circulan en la región, lo hacen a través de la ruta del Pacífico.
- Condena internacional: Rusia, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos y los Gobiernos de Colombia, México y Brasil han condenado las acciones estadounidenses. Expertos califican los ataques a embarcaciones como "ejecuciones sumarias" que violan el derecho internacional.

