La penosa suerte de los equinos
En los últimos años muchos países del mundo prestan cada vez más atención a la protección de los animales.
Los EE. UU. son uno de los que cuentan con un movimiento muy desarrollado de defensa de los derechos de animales y hay muchos entusiastas involucrados.
Una de las organizaciones activistas en este campo es la Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales, conocida más como la SPCA, por sus siglas en inglés. Se dedica a la protección de potrillos y caballos domésticos abandonados por sus dueños, que sufren enfermedades y desnutrición por no ser capaces de alimentarse independientemente.
La SPCA fue establecida hace 20 años para cuidar alrededor de 15 caballos. Desde entonces, la cantidad de animales que están bajo su protección aumentó 3 veces. Para un país entero, esta parece una cantidad bastante reducida, pero los organizadores del proyecto comentan que este aumento ya les exige hacer un esfuerzo extraodinario. Las facturas de alimentos ascienden a 10.000 dólares por mes, mientras que para poder mantener a todos los animales que se encuentran en su centro de rehabilitación de la ciudad de Hialeah, en Florida, se necesitan 5.000 dólares más. La asociación es la única que se ocupa del rescate y el ciudado de los equinos en la región y está pidiendo donaciones privadas para poder seguir cuidando de sus caballos.
La presidenta de dicha organización, Jeannette Jordan, comenta que la iniciativa es muy importante, porque en los últimos años debido a la crisis económica global aumentó mucho el número de caballos abandonados: sus amos los dejan cuando ya no tienen recursos para alimentarlos. Los animales empiezan a caminar y llegan hasta las calles creando una situación bastante peligrosa para ellos mismos, los transeúntes y los conductores. Se meten en granjas vecinas buscando comida y a veces derriban las cercas y hasta pelean con otros animales. Como el terreno está lleno de hierba mala, el estado físico de los caballos salvajes empeora muy rapidamente: pierden peso y empiezan a sufrir heridas y enfermedades.