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EE.UU. estudia castigar a los diputados rusos que aprobaron el veto a la adopción de niños
La petición, que aparece en la página de la Casa Blanca, urge a la Administración de Barack Obama a extender las sanciones del Acta Magnitski a los diputados rusos que aprobaron este viernes la ley Dima Yakovlev, una de cuyas cláusulas prohíbe a los estadounidenses adoptar niños rusos.
Desde que fue publicada este viernes, la petición ya ha recabado bastantes más de las 25.000 firmas necesarias para que la petición sea examinada por el presidente.
Por su parte, los parlamentarios rusos comentaron que si el presidente estadounidense aprobara la petición, ello podría conducir a la ruptura de las relaciones diplomáticas entre Rusia y EE.UU.
"Será un escandalo sin precedentes, con el riesgo añadido de ruptura de las relaciones diplomáticos. En respuesta, todos los funcionarios estadounidenses que apoyaron el Acta Magnitski serán incluidos en nuestra lista", comentó Viacheslav Níkonov, vicepresidente del Comité de los Asuntos Exteriores en la Duma, cámara baja del Parlamento ruso.
El vicepresidente del Comité de la Legislación Constitucional de la Duma, Dmitri Viatkin, calificó la iniciativa de los estadounidenses de "intento de aumentar la tensión entre los países".
"Es un escándalo muy serio y, lo que es más importante, se trata de un absoluto sinsentido. Por su parte, ellos plantean un tipo de Guerra Fría segura que no traerá nada bueno para las relaciones", dijo el funcionario.
El pasado 19 de diciembre la cámara baja del Parlamento ruso aprobó el proyecto de la ley Dima Yákovlev, concebida en respuesta al Acta Magnitski que impone sanciones a los funcionarios rusos. La ley todavía no ha entrado en vigor, ya que debe ser aprobada por el Consejo de Federación, la cámara alta del parlamento, y firmada por el presidente, que ya calificó el documento de "respuesta adecuada" durante una macroconferencia de prensa celebrada el pasado jueves.
Por su parte, los parlamentarios rusos comentaron que si el presidente estadounidense aprobara la petición, ello podría conducir a la ruptura de las relaciones diplomáticas entre Rusia y EE.UU.
"Será un escandalo sin precedentes, con el riesgo añadido de ruptura de las relaciones diplomáticos. En respuesta, todos los funcionarios estadounidenses que apoyaron el Acta Magnitski serán incluidos en nuestra lista", comentó Viacheslav Níkonov, vicepresidente del Comité de los Asuntos Exteriores en la Duma, cámara baja del Parlamento ruso.
El vicepresidente del Comité de la Legislación Constitucional de la Duma, Dmitri Viatkin, calificó la iniciativa de los estadounidenses de "intento de aumentar la tensión entre los países".
"Es un escándalo muy serio y, lo que es más importante, se trata de un absoluto sinsentido. Por su parte, ellos plantean un tipo de Guerra Fría segura que no traerá nada bueno para las relaciones", dijo el funcionario.
El pasado 19 de diciembre la cámara baja del Parlamento ruso aprobó el proyecto de la ley Dima Yákovlev, concebida en respuesta al Acta Magnitski que impone sanciones a los funcionarios rusos. La ley todavía no ha entrado en vigor, ya que debe ser aprobada por el Consejo de Federación, la cámara alta del parlamento, y firmada por el presidente, que ya calificó el documento de "respuesta adecuada" durante una macroconferencia de prensa celebrada el pasado jueves.
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